A nivel internacional los sueldos en la Argentina están demasiado devaluados y se cobra mucho menos que por la misma posición incluso en mercados similares y países vecinos.

 Aún así hay personas que insisten en trabajar en relación de dependencia en el país y necesitan saber en este contexto qué constituye un buen sueldo en pesos argentinos.

Qué es y qué no es un buen sueldo no es una pregunta a la cual se pueda dar una respuesta unívoca. Si el sueldo en pesos es bueno puede depender de un sinfín de factores: de la cantidad de horas y esfuerzo que se deban invertir para ganarlo, del nivel de conocimiento o experiencia que el trabajo requiera, etc. 

De la misma manera, la respuesta cambia de acuerdo a la perspectiva con la que se encare la pregunta. Una persona puede considerar que los pesos que gana constituyen o no un buen sueldo de acuerdo a la cantidad y calidad de bienes y servicios que éste le permite adquirir. Otras personas compararán sus ingresos con los de sus pares y colegas de otras empresas o sectores para considerar si tienen o no un buen sueldo.

Así y todo, la pregunta tiene solo respuestas particulares de acuerdo a la persona que se la hace, por lo tanto, a continuación ofrecemos algunos datos sobre sueldos en pesos argentinos que pueden ayudar a tomar una determinación sobre qué significa hoy tener un buen sueldo. 

¿Cuánto es un buen sueldo Argentina 2023?

En la Argentina los sueldos van variando mes a mes y su poder de compra también. Por eso no es tan sencillo determinar a secas qué es «un buen sueldo». 

Un experto que lo intentó recientemente fue Sebastián Maciarello, gerente de Selección y BPO de Auren, para quien la respuesta es compleja por la diferencia entre lo que las personas quieren ganar y lo que las empresas están dispuestas a pagar por su trabajo o su talento.

«El ingreso promedio de los argentinos fue en el primer trimestre del año de $42.394. En función de este y otros factores, un buen sueldo en la Argentina oscila en un rango de entre $300.000 y $500.000 brutos mensuales«, resaltó entonces el experto de Auren.

Hay que aclarar que se basaba para esta respuesta en la canasta básica de bienes y servicios que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y que no incluye el pago de los alquileres, que son uno de los gastos más distorsionados en estos años. 

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