
¿»Sandbagging»? Sí, lo sabía… pero igual voy a reclamar
En el universo del M&A (fusiones y adquisiciones), es habitual encontrarnos con anglicismos jurídicos que, más allá de su nombre peculiar, encierran conceptos clave para el éxito, o el desastre de una operación. Hoy le toca el turno a…SANDBAGGING (o ¿se puede reclamar por algo que ya conocías? La respuesta está en la cláusula que casi nadie lee).
¿Qué es el sandbagging?
La cláusula de sandbagging es una disposición contractual que permite al comprador reclamar por incumplimientos de las declaraciones y garantías (reps & warranties) incluso cuando ese incumplimiento era conocido por el comprador antes de la firma o del cierre de la operación.
Dicho de otra forma: “Sí, lo sabía, pero te voy a demandar igual porque me lo garantizaste”.
Desde una perspectiva jurídica, puede parecer contradictorio. ¿Cómo va a poder alguien reclamar por algo que ya conocía? Pues la respuesta, como en tantas otras ocasiones, está en lo que se haya pactado y redactado en el contrato.
¿Para qué sirve esta cláusula?
El sandbagging tiene la u finalidad de dar al comprador una protección adicional. Aunque este haya detectado el riesgo en la due diligence, puede reservarse el derecho a reclamar después.
Y, en España ¿cómo funciona?
En España es imprescindible redactar esta cláusula de forma clara, expresa y precisa. De no hacerse así, en caso de procedimiento judicial, el juez podría considerar que el comprador, al conocer el riesgo, lo aceptó tácitamente y otorgaría la razón al vendedor. Por tanto, si estás comprando y quieres mantener tus derechos de reclamación incluso frente a riesgos conocidos, asegúrate de incorporar una cláusula de sandbagging bien formulada.
La contrapartida: cláusula anti-sandbagging
Como todo abogado (y todo fan de “Top Gun”) sabe, frente a una medida siempre cabe una contramedida. En este caso, consistiría en incorporar una cláusula “anti-sandbagging”. Esta trata de evitar reclamaciones oportunistas cuando el comprador ya conocía los riesgos, pero decidió seguir adelante con la operación. Su inclusión suele ser una exigencia del vendedor para garantizar una cierta seguridad jurídica postventa.
Ambas cláusulas son perfectamente compatibles con una negociación equilibrada y transparente. Lo importante es que las partes conozcan bien su significado, su alcance y sus consecuencias.
En definitiva:
- Si compras y buscas la máxima cobertura, incluye una cláusula sandbagging.
- Si vendes y no quieres sorpresas, reclama una cláusula anti-sandbagging.
En el contexto de una operación de M&A, una cláusula aparentemente secundaria puede marcar la diferencia entre una indemnización millonaria y un “haberlo pensado antes”.
¿Estás en plena negociación de una compraventa? ¿Quieres asegurarte de que tus cláusulas te protegen de verdad? En Auren podemos ayudarte. Nuestro equipo de M&A Legal te asesora en todo el proceso, desde la redacción del contrato hasta la defensa ante posibles reclamaciones futuras.
David Fauquié Borrajo
Director Auren Legal